Gestionar el riesgo

La VIII Plataforma Regional para la Reducción del Riesgo de Desastres en las Américas y el Caribe se llevó a cabo en Punta del Este e incluyó el debate alrededor de la prevención y manejo de incendios forestales.
Cerca de 3000 personas participaron, del 28 de febrero al 2 de marzo, de la VIII Plataforma Regional para la Reducción del Riesgo de Desastres en las Américas y el Caribe (PR23) que se desarrolló en formato híbrido y fue organizada por la Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres (UNDRR) y el Sistema Nacional de Emergencias de Emergencias (Sinae).
En esta edición, el tema principal de la PR23 giró alrededor del uso de la tecnología y la ciencia como herramientas clave para la reducción del riesgo de desastres. El evento permitió que gobiernos, organismos intergubernamentales, el sector privado, la sociedad civil, las comunidades científico-tecnológicas, estudiantes, las agencias de cooperación y los donantes, así como otros actores relevantes de las Américas y el Caribe, participen e intercambien experiencias en reuniones plenarias, reuniones paralelas, talleres y laboratorios.
Durante el tercer día del encuentro hubo un espacio específico destinado al trabajo alrededor de los incendios forestales. En esa instancia se hizo hincapié en la necesidad de tener una mirada transversal e integral frente a estos fenómenos. Es así como dentro del debate se contemplaron aspectos como el cambio climático, la gobernanza, la infraestructura, las estadísticas y las comunicaciones.
Rafael Sosa, el coordinador del Operativo de Protección Anti-Incendios Forestales (PAIF) de la Sociedad de Productores Forestales, participó virtualmente de la PR23. Al respecto comentó que: “para nosotros es muy importante participar [de este tipo de eventos] desde dos puntos de vista. Por un lado, ser reconocidos y tenidos en cuenta por el Sinae y las demás instituciones estatales como actores de relevancia en la atención a una problemática (incendios forestales) de la que asumimos la responsabilidad de actuar, en coordinación con el Estado, en tareas de prevención, detección y combate, con recursos propios o contratados. Por otro lado, la participación en estos eventos permite generar conocimientos y redes de contacto a nivel internacional que facilitan el intercambio de experiencias, adaptando los métodos y las tecnologías a nuestras particularidades y necesidades”.