Por cada troza de madera que entra a una planta de celulosa o un aserradero, además del producto final, se generan aserrín y pinchips. Aunque estos residuos hoy se reutilizan para obtener energía, desde el Grupo de Ingeniería de Procesos Forestales, de la Facultad de Ingeniería – UdelaR, se investiga cómo y qué productos se podrían fabricar en una biorrefinería para ofrecer aún mayor valor agregado.