Una chispa que no se apaga
María Neyeloff nació en Argentina, pero se siente tan uruguaya como el paisaje que la rodea cada mañana en Fray Bentos. Creció en el interior del país, estudió ingeniería química en Montevideo y desde hace 12 años trabaja en una planta de celulosa a la que ingresó como parte de un programa para jóvenes profesionales. Hoy, ya como ingeniera de producción, su deseo por aprender y aportar se mantiene más vivo que nunca.